Si no concurrió a la jornada de AAPRESID en el establecimiento “El Remanso”, es difícil que entienda el título de esta nota desde el vamos, porque todo tiene su explicación, y el título resalta dos momentos de la jornada del pasado jueves en el campo de Fernando Alzueta y Laura Hernández sobre la vieja ruta 205, a pocos kilómetros de la planta urbana.
La Regional AAPRESID Bolívar realizó el pasado jueves una nueva jornada de demostración, las llamadas UPA (Un Productor en Acción), y tuvo un muy buen acompañamiento de productores y estudiantes no sólo de la Escuela Agropecuaria de Bolívar sino también de la Escuela Agropecuaria de General Alvear.
Desde temprano los propietarios del establecimiento recibieron a los visitantes para la acreditación y servirles el desayuno. Ya desde que amaneció el sol amenazaba con temperaturas de verano y hacia el mediodía parecía pleno enero. Algunas de las charlas tuvieron lugar debajo de algún momento, a la orilla de los cultivos, como la de Luis Ventimiglia, al costado de una cebada. Estaba previsto que lo hiciera bajo un gasebo; pero a las 2 de la tarde y con la descripción termostática reinante, era sólo para corajudos ponerse bajo esa lona.
El sol no era tal y la temperatura por ende tampoco cuando Laura Hernández y Fernando Alzueta contaron la historia del establecimiento con la proyección de varias fotos que reflejaban la vida familiar. El Remanso es un campo del padre de Fernando, León, que acompaña hasta hoy a los Alzueta.
El matrimonio detalló el desarrollo de la vida familiar como un viaje, al que llegó como pasajero invitado Joaquín, el hijo, hace poco menos de 20 años. Pasaron por inundaciones, por sequías, por buenas y por malas, por experiencias en el deporte, en lo comercial, hasta llegar a Agronomía El Amanecer primero (hoy es sólo propiedad de Ramiro Pagola), a autoconvocados y la lucha por la 125 después, y a la presidencia de Fernando Alzueta en la Sociedad Rural desde hace varios años hasta nuestros días.
Las distintas movidas familiares, incluyéndolo a Joaquín ya más grande y con poder de toma de decisión, hicieron que los Alzueta-Hernández se fueran adaptando a distintos momentos y circunstancias, por lo que el grupo de whatsapp familiar se llama “Los Plastilina”, por aquello de las propiedades adaptativas de ese noble producto. De allí la primera parte del título.
La jornada avanzó, se paró para el almuerzo, se continuó con la mencionada charla de Ventimiglia y mientras el hombre de INTA 9 de Julio disertaba bajo un monte, llegó una visita no esperada por la mayoría: el Ministro de Agroindustria de la provincia de Buenos Aires, Leonardo Sarquís. “Leo”, como lo llama Alzueta en confianza de tantas veces que se han cruzado ya en los últimos cuatro años, recibió la invitación y si bien no confirmó enseguida su presencia, lo tuvo en cuenta y se vino porque la agenda se lo permitió.
Sarquís les habló a los presentes en el galpón del establecimiento, antes de las últimas dos charlas con las que finalizaba la jornada. Dijo que venía en la gira de despedida (se va con Vidal el 10 de diciembre) como “Los Chalchaleros”, y de ahí la segunda parte del título de esta nota. Además, el todavía ministro de Agroindustria bonaerense dijo que se van a quedar cerca para estar en contacto con los productores y que eso les pide el 40 por ciento que no votó por Fernández. Claro que en la provincia la diferencia de Kicillof sobre Vidal fue superior.
Después llegaron las últimas dos charlas y la despedida de una nueva jornada UPA organizada por la regional local de AAPRESID. Hace 15 años (en 2004) se realizaba la primera de estas jornadas en el campo de Ricardo Gilmore. Y lógicamente que no será la última; aunque esta quedará en el recuerdo por el cargo del propietario del establecimiento, el presidente de la Rural, de “Los Plastilina”, y la visita de un ministro a la jornada, Sarquís, de “Los Chalchaleros”.
Angel Pesce
