Es tu primera experiencia como concejal, ¿qué representa?
-Un desafío. Y como todo desafío, uno está abierto para aprender, más allá de que estuve antes indagando, tengo compañeros concejales, pero no es lo mismo ver de afuera que trabajar adentro. Y lo que hemos hecho desde diciembre hasta ahora es interesante, uno está aprendiendo cuestiones no habituales, lo mío siempre fue la educación. Si bien ocupo el lugar de presidenta de la comisión de Educación, también me sumé a otras porque creo que es la forma de aprender y empaparte de la labor de cada una de ellas, dado que es lo que te va a servir el día de mañana para vehiculizar las inquietudes del vecino.
“TENDREMOS QUE LIDIAR CON LA VERDADERA PESADA HERENCIA”
El período de sesiones ordinarias del Concejo comenzará en marzo o abril, pero estos días se están reuniendo para analizar un tema relevante: el presupuesto.
-Sí. El receso del Concejo siempre fue en enero y febrero, pero en este caso tuvimos una sesión extraordinaria y a partir de ahí estamos trabajado en comisión por el tema presupuesto, algo muy interesante.
Un tema medular, transversal a casi todos los demás.
-Sí, es medular, allí converge todo lo que hará el municipio, o casi todo, digamos.
¿Hay algo que puedas adelantar acerca de cuál será la postura del bloque cuando comiencen las sesiones ordinarias?
-En términos generales, te puedo adelantar en que se va a hacer foco en la cuestión social, que es el tema hoy en la Argentina. El municipio ha tenido que ponerse al hombro todo estos años la crisis, estamos dentro del marco de la ley de Emergencia nacional, ya la palabra lo indica. Ves áreas en las que el municipio ha tenido que enfrentar con sus recursos, y lo tendrá que seguir haciendo, el hueco que dejaron las partidas que no llegaban de provincia y nación. Este gobierno, y ahora digo también el provincial y el nacional, van a tener que lidiar con la verdadera pesada herencia. La situación es terrible.
Afrontarán ese compromiso dentro de otro marco, porque no es lo mismo que la provincia y la nación sean ahora gobernadas por el proyecto político que integran Pisano y su gente.
-Por supuesto que eso te da una cierta protección, por llamarla de alguna manera. Más allá de que las partidas tengan que llegar y de que la gravedad de la situación no cambiará de un día para otro, todas las autoridades gubernamentales lo dicen. El municipio sea hecho cargo de lo social, de la salud, la educación. En Bolívar ha habido una cantidad importante de desocupados en estos años, y se trata de hombres y mujeres con nombres y apellidos, familias. El estado municipal ha tenido que proteger socialmente a esas personas.
“EN EDUCACIÓN ESTÁN ELIGIENDO A LOS MEJORES”
¿La desocupación y temas relativos a la crisis económica y social son las demandas mayoritarias de nuestra población? ¿Qué inquietudes te han planteado los vecinos en estas primeras semanas como concejal?
-Sí. Y los comercios se quejan del tema tarifas, de haber tenido que vivir con esos aumentos, que hoy están congelados pero de todos modos tienen que hacerles frente. Hablás con ellos y la situación es complicada. En el ámbito educativo, estoy en relación con docentes y asistentes sociales, que te plantean que hay muchos chicos que quieren estudiar peros sus padres no han podido mandarlos al no estar en condiciones de hacerles frente a los costos de un departamento y otros. Cosas de los años noventa, no deberían estar pasando hoy. Y después, aparecen demandas vinculadas con lo doméstico, cuestiones que ocurren en la vía pública, en distintos espacios de la ciudad, etcétera. Nosotros nunca prometemos una solución inmediata, y la gente lo entiende, porque muchas veces lo que quiere es que te tomes un momento para escucharla, eso es muy importante.
El vecino quiere al menos ver señales, si aún no aparece el puerto.
-Claro. Lo que yo veo es que la gente está esperanzada, después de toda esta terrible debacle. Algunos te dicen que votaron al macrismo porque pensaban que iba a remontar algo, pero luego estalló la debacle, y se han dado cuenta. Este nuevo gobierno es sinónimo de esperanza. Yo estoy en Educación y veo la gente que hay en el ámbito educativo en nación y provincia, y me reconforta saber que están eligiendo a los mejores. Tenemos el caso de mi amiga personal Marcela Esnaola (flamante funcionaria provincial), que lo consiguió por sus méritos, y hoy ocupa un lugar en el que sabe cómo desempeñarse.
Y eso que venimos del mejor equipo de los últimos años. No sería justo cargarles con ese mote a los funcionarios del nuevo gobierno, pero en tu criterio están nombrando a los mejores.
-Sí. Yo creo que sí. Tener en provincia a una Claudia Bracchi, una Adriana Puiggrós, Nicolás Trotta en nación.
¿Y fuera de la educación también?
-Sí. Estoy prestando mucha atención a lo que ocurre con el Ministerio de Ciencia y Tecnología, que fue desmantelado y eso constituye una de las deudas más terribles del macrismo. Le bajaron el rango, y ahora vuelve a ser un Ministerio y se dan nuevamente becas para proyectos, aumentan los sueldos. Esas son las estrategias que debemos implementar como gobierno para construir un país mejor. Todo esto me da la pauta de que vamos por el buen camino. Esas son las señales de las que hablábamos recién. Conozco a las personas que te nombré, y sé que son las mejores. Y en el ámbito municipal tenemos a un intendente que se puso la crisis al hombro estos años, y lo seguirá haciendo porque tiene muy clara la magnitud del debacle social y de la herencia que nos dejó el macrismo, con la que tendremos que lidiar.
Chino Castro
Adentro para hacer cosas, o afuera para quejarse
La función de concejal es nueva para vos, pero no el grupo de trabajo ni el proyecto político, al que te sumaste hace unos cuantos años, tal vez sin provenir de una tradición familiar peronista. ¿Qué te llevó a adherir?
-Estuve cuarenta años sin pensar nunca en tener una participación política activa, aunque creo que en política, todos estamos, de alguna u otra manera. Me convocó ‘Bali’ Bucca en 2010, cuando era candidato a intendente. Convocó a un grupo del área educación, que me pareció interesante y novedoso. Pero al ir vinculándote con otros equipos de trabajo, empezás a ver otras cuestiones, que con la mirada que uno tenía desde afuera no advertía. Ahí empecé a ver lo social, a conocer realidades de primera mano que me contaba la gente durante la campaña.
¿No tenías noticias de todo eso?
-Sí, porque al pertenecer al ámbito de la educación, trabajar muchos años en escuelas como docente secundaria, veía realidades muy diferentes entre sí. Pero al ingresar a la política activa una se da cuenta de que a veces es más fácil quejarse, quedarse despotricando en la queja, que asumir responsabilidades. Vos decidís si quedarte mirando desde afuera o asumir responsabilidades. Al hacer esto último, entendés que desde tu pequeño lugar podés hacer algo. A la Dirección de Educación no me llegaban cuestiones solamente educativas, sino muchas atravesadas por lo social, y uno se hacía cargo y trataba de resolver, no es que descartaba al considerar que pertenecían a otra área. Y siempre tengo que agradecer, tanto en ese momento como ahora (fue directora de Educación municipal hasta fines del año pasado), el equipo de trabajo que tenemos. Porque una sola persona no puede resolver todo, uno se apoya en el compañero para atender los problemas. Para eso somos un equipo y estamos encuadrados en un proyecto político.
