El aislamiento preventivo social está afectando de sobremanera a la totalidad de los deportes, incluso el presidente Alberto Fernández mencionó como al pasar, en su última presentación ante los medios, que el desarrollo de actividad física facilita el contagio del COVID 19. Pero no sólo quienes practican alguna disciplina se ven perjudicados al no poder desarrollarla de manera habitual; el entorno de los deportes se ven afectados y en este aspecto hacemos referencia al sustento de muchas personas –y sus familias- que trabajan en complejos deportivos. Tal es el caso, por ejemplo, de los propietarios de canchas de padel.

 Hace unos días, el diario La Voz de San Justo (de San Francisco, Córdoba), indicó que tras este confinamiento se creó la llamada Unión Argentina de Trabajadores de Clubes de Padel. Inmediatamente después de su creación, desde ese organismo, emitió un comunicado para proponer el reinicio del juego y el regreso al trabajo, con una serie de medidas tendientes a cumplir con los requisitos sanitarios necesarios.

Quienes integran esta Unión consideran que “es un deporte de cero contacto entre sus jugadores y que mediante un protocolo, podría estar jugándose con normalidad y ayudando, además, a la distracción física y psicológica de sus jugadores”, señala el medio cordobés.

Ante esta situación preocupante, los referentes hicieron llegar a la comunidad y a los respectivos gobiernos, un propio protocolo que se cree, puede permitir la actividad sin problemas.

«Esta Unión es algo nuevo, es una emergente de todo esto que nos está metiendo a todos en un pozo. La actividad del padel es en su totalidad privada, esto quiere decir que quizás en un par de meses más estaríamos hablando del cierre de la totalidad de los complejos de padel del país. Nosotros cumplimos una función social, pero nos manejamos como pymes. Este conflicto que nos aqueja nos permite emerger con una Unión que no existía antes, que alcanza a todos los clubes del país. En ese sentido se redactó un proyecto de ley que la semana pasada se presentó en el Congreso, ya le dieron el aprobado en comisión. Estamos esperando que empiece a sesionar para ver qué pasa con esto», explicó César Salazar, de la «Cancha del Bela».

Y añadió: «en principio pedimos poder abrir. No estamos hablando de solamente ir a divertirnos. Detrás de la actividad deportiva hay familias, hay profes que dan clases en escuelitas de padel, hay gente que es su único recurso para sobrevivir, en este sentido es que se hace esta movida».

Para no desaparecer, los clubes piden no sólo volver a abrir sus puertas, sino que se los reconozca de hecho como clubes de padel. «Tenemos un problema: no estamos regulados bajo ninguna denominación ante AFIP y no estamos alcanzados por ningún tipo de subsidio o beneficio. Pedimos que se nos reconozca de hecho para que ningún club tenga que cerrar. Es algo bastante angustiante para nuestro sector. Vivimos de esto, nos dedicamos a esto. Este es mi único sustento. Así como a mí, esto les pasa a muchos clubes del país», destacó Salazar.

Qué dice el protocolo

“* Se le tomará la temperatura a todos los jugadores.

* Los turnos de padel de duración una hora y media, tendrían una separación de 30 minutos entre uno y otro para no permitir que las personas que finalizaron su turno y los que comienzan el turno siguiente, se crucen en el complejo deportivo.

* El dueño de las canchas poseerá barbijo y guantes.

* Los jugadores concurrirían al complejo solos y se retiraran del mismo, ni bien concluya el turno de pádel correspondiente.

* En un principio las personas mayores a 65 años, no podrán concurrir a practicar padel por ser personas de riesgo.

* Cada jugador estará obligado a llevar su cantimplora de agua personal.

* Antes de entrar a la cancha, en una mesa lindera a la entrada a la cancha de juego, habrá alcohol en gel o spray de alcohol al 70, para que cada jugador de los 4 participantes del turno, se desinfecte las manos.

* Cada jugador se colocará un guante descartable en la mano que no agarra la paleta (se lo colocará en la mano que agarra la pelotita).

* El dueño de las canchas desinfectará las dos pelotitas que se usarán en el partido, antes de comenzar el turno.

* Cada jugador abonará el turno de padel respetando las distancias entre un jugador y otro, para poder retirarse del complejo deportivo individualmente.

* El dueño de las canchas o empleado, en esa media hora que hay de lapso entre turno y turno, desinfectará las cuatro sillas ubicadas fuera de la cancha (con distancias de dos metros entre una silla y otra). También desinfectará picaportes.

Por último, además, recordaron que la cancha de padel tiene dimensiones de 20 metros por 10 metros de ancho, donde la red divide a la mitad la cancha, separando dos jugadores de cada lado. Es decir, en un cuadrado de 10 metros por 10 metros hay sólo 2 jugadores, sin roce alguno entre ellos. Se respetarían las medidas de seguridad e higiene y en los horarios permitidos por el gobierno.

El padel es un deporte que se puede practicar en la flexibilización de la cuarentena y permitir que los dueños de canchas de Pádel puedan trabajar y abonar sus gastos que siguen corriendo desde el 1 de marzo de 2020”.

 En Bolívar, luego de analizar distintas alternativas sobre posibles permisos a determinadas actividades físicas, se llegó a la conclusión de que continúen canceladas todas las disciplinas y, por ende, cerrados los complejos y gimnasios donde se practican. Como ocurre con otras profesiones, empieza a contrastar la cuestión sanitaria con la profesional también en el deporte.