Tobías Carrizo, el joven piloto de la ciudad de Ezeiza que lleva en su máquina la preparación del bolivarense Andrés Justel, logró completar la séptima etapa del Dakar. Quizás sea ésta la más exigente de las pruebas ya que, por su complejidad y por no tener permitida la asistencia del piloto por sus mecánicos, es la denominada Etapa Maratón.

De esta manera, el más joven de los participantes de Quads en el rally más difícil del mundo, logró ubicarse décimo en la clasificación general y mañana seguirá compitiendo con “la bestia” sin inconvenientes importantes.

Fueron 453 kilómetros de especial y 248 de enlace, desde Ha´il hasta Sakaka, en Arabia Saudí, los que recorrió Carrizo en el día de hoy.