El reloj marcaba las 06:00 cuando en la aún oscura madrugada bolivarense se desató una fuerte caída de granizo. El fenómeno ocurrido tuvo la particular de que se produjo sin precipitaciones, hecho que no sucedía desde el año 2004.

No obstante, minutos más tarde se desató un breve pero intenso chaparrón que terminó de despabilar a los recién amanecidos.

Esta redacción recibió fotos de las piedras que cayeron en la planta urbana, como la que ilustra esta nota. Como puede verse, las mismas tuvieron un tamaño considerable aunque no hubo registros de daños importantes.

El Servicio Meteorológico Nacional había emitido un Alerta Amarillo para la provincia de Buenos Aires, específicamente en su zona noroeste y centro. “Intensas ráfagas de viento y ocasional caída de granizo de diversos tamaños”, señala el parte. En Bolívar, al menos, se cumplió.