El pasado sábado 18 de septiembre, tuvo lugar en el cálido auditorio de la Biblioteca Rivadavia, la vuelta a la presencialidad de los espectáculos musicales que ofrece la Asociación Musical, que casi tras dos años de espera, finalmente recibió a Quintete, con un auditorio colmado de espectadores, que respetando el estricto protocolo disfrutaron de una noche musical mágica, de altísimo vuelo.

Quintete es una formación con músicos de la región, liderada por la talentosa saxofonista Ingrid Feniger en saxo alto y tenor, acompañada de Quique Ferrari en bajo, Elías Colo en Piano, Eric Vallejos en batería y Esteban Landoni en guitarra.

El show significó la vuelta a la presencialidad de los espectáculos ofrecidos por la Asociación Musical, pero también fue el primer show presencial que ofreció la banda tras muchísimos meses sin poder encontrarse con su público y disfrutar de la magia de la música en vivo.

En la velada, que fue verdaderamente gratificante, conmovedora y poco frecuente, ya que la calidad del espectáculo y de quienes lo ofrecieron no es moneda corriente, sonaron canciones de propia autoría de Ingrid, de una exquisitez difícil de poner en palabras, puesto que cada una de sus creaciones resultaron ser un viaje de emociones y sentimientos puestas de manifiesto en notas y melodías que no se parecen a nada.

Trosco, Cinco y Fue Aire son algunas de las canciones creadas por Ingrid. A la vez, fueron de la partida piezas de grandes artistas como Aaron Parks y Brad Mehldau. También sonaron composiciones de artistas actuales del mundo del jazz que no son tan populares, pero que están colmando de genialidades el renovado repertorio jazzero. Verdaderamente fue una alegría y una maravillosa celebración el encuentro.

Los presentes disfrutaron de un show de altísimo nivel, con destacados artistas que no solamente ofrecieron magia de principio a fin, sino que disfrutaron a pleno del concierto que ofrecieron, con caras de regocijo y satisfacción que no se escondieron, sino por el contrario, brotaron sonrisas y caras de emoción durante toda la jornada.

Para la Asociación Musical de Bolívar fue una gran alegría también ya que la vuelta a la presencialidad fue con localidades agotadas (las entradas solo se vendían anticipadas y se agotaron días antes del evento. Ofició de anfitriona y presentadora la reconocida música y docente María Marta Molfese, integrante de la comisión directiva de la Asociación Musical, quien se mostró también sumamente emocionada por el reencuentro con la música y los espectadores, pero por sobre todas las cosas celebró en varias ocasiones la presencia de gente joven en el auditorio acompañando la propuesta, algo que tal vez no resulta frecuente.

Lo cierto es que fue una noche redonda, completa, a la que cuesta ponerle adjetivos y describirla, ya que fue una verdadera aplanadora musical que hizo que cada uno de los presentes tenga en su interior viajes y sensaciones maravillosas, que solo la música puede ofrecer. Ojos brillosos y achinados de sonrisas bajo los barbijos, aplausos fuertes, ensordecedores y prolongados, silencios de disfrute y escucha, son algunos de los reflejos de una noche que difícilmente olviden quienes estuvieron allí.

En lo que respecta a la Asociación Musical, que no detiene su andar y trabaja siempre de manera silenciosa y articulada, anunciaron que en el mes de noviembre se realizará en el auditorio de la biblioteca, un homenaje a Piazzolla y su música, con lo cual estaremos atentos a las próximas novedades de la institución.

L.G.L.