Es posiblemente el último feriado implementado (desde 2016) y pandemia mediante, han sido pocas las ocasiones en que se ha teniendo en cuenta esta fecha patria que recuerda a Martín Miguel de Güemes, otro de los héroes de nuestra historia, reconocido como tal un poco más acá en el tiempo que otros.

Salvo para la administración pública (entes municipales, provinciales y nacionales), más los bancos, el feriado ayer tuvo poco impacto en la ciudad. No todos los supermercados adhirieron, y muchos de los comercios de las avenidas, aprovechando la víspera del Día del Padre, aprovecharon a abrir para seguir recuperando lo que perdieron en los últimos dos años a consecuencia del Covid-19.

Muchos se preguntan cuántos feriados vamos a tener dentro de 200 años si seguimos agregando fechas patrias no laborables a nuestro calendario.

Seguramente en el futuro se reemplacen algunas por otras. Europa, por ejemplo, no tiene tantos feriados y nos lleva de Cristo para acá al menos 1.492 años.

En Bolívar se habilitó la Plaza Salta hace algunos años también, donde ayer tuvo lugar el homenaje. Plaza que en esta ciudad podría haber llevado el nombre de algún “prócer” local, de esos que siguen esperando en la fila a que alguien se acuerde de lo que hicieron y piense en homenajearlo.

Mientras tanto, los feriados siguen siendo demasiado optativos para la mayoría. Salvo el que se pudo ir y aprovechó el fin de semana XXXL, el resto trabajó o no bajó el ritmo. Fue un viernes distinto porque no hubo clases ni movimiento en los bancos y la Municipalidad; pero por el resto de las actividades, fue un día más.

Ángel Pesce.