Por distintas circunstancias que se presentaron una vez que arribó a Suiza, la bolivarense Brenda Sardón vivió una muy rica experiencia en el marco de su participación en la tercera y última Copa del Mundo, previa al Mundial 2023 de remo adaptado. En compañía de su entrenadora Lorena Bembibre, arribaron el pasado miércoles a Lucerna y fueron sumando lindos momentos hasta el fin de semana, cuando se llevaron adelante las regatas.

De regreso al país, Brenda le dijo a La Mañana lo siguiente: “sinceramente, estuvo muy buena la experiencia. A nivel deportivo, mi rival directa era una palista sueca; no pude ganarle pero hice mi mejor tiempo personal en competencia. Si bien esto no fue una regata oficial sino más bien una exhibición, y aunque he hecho marcas más bajas en entrenamientos, esta vez hice la mejor en una carrera. Y después, el resto de lo que hicimos fue positivo, tal como el hecho de poder estar remando en Lucerna. Se hacen tres copas del mundo previas al Mundial; las primeras dos ya tuvieron incluido el pararowing y esta regata exhibición se hizo porque el año próximo la agregarán oficialmente al calendario, lo cual significa un paso enorme para un deporte tan tradicional en muchos aspectos como lo es el remo, así que eso estuvo buenísimo. El recibimiento de la organización fue genial y nos encontramos con un lugar de excelente accesibilidad, tanto en el agua como en el resto de la infraestructura, edificio, duchas, etc. y eso es para resaltar”.

Encuentro con un bolivarense y otro argentino

“También estuvo bueno encontrarnos con un bolivarense que vive cerca de Lucerna y fue a vernos un día, Alejandro Noel y su esposa. Y también estuvimos con otro señor, Juan Carlos, quien leyó en el diario local de Lucerna acerca de la participación de un bote argentino y se acercó a la pista. El vive allá hace 50 años e iba a viajar a París porque estaba el Mundial de atletismo paralímpico, pero se quedó en Suiza y nos acompañó. Incluso el último día nos ayudó a desarmar el bote. Lo llamativo es que se trata de un argentino que vive allá desde hace mucho tiempo y no tiene ningún contacto directo con el deporte paralímpico. Sinceramente nos encantó su compañía; si hay algún evento paralímpico cerca de donde él vive, se acerca y apoya a los deportistas. En líneas generales, resultó un muy buen viaje. Aunque estuvimos sólo 72 horas allá y otras 51 viajando, significó una muy linda experiencia”.

El próximo objetivo en la agenda de Brenda no es nada menor, se trata del Mundial a realizarse en Belgrado, Serbia.