La primera actividad del domingo ruralista tuvo escenario sobre el alambrado perimetral del predio, que da a la calle de acceso a las instalaciones de Remates Ferias. Allí estaban dispuestos los lugares que, previo sorteo, fueron asignados a las 20 parejas anotadas para participar del Concurso de Asado a la Estaca, con $ 100.000 en premio al binomio ganador.

A las 8 de la mañana comenzaron a encenderse los fuegos, tarea que requirió de ciertas habilidades ya que el reglamento determinó que no podían utilizarse para ello ningún elemento colaborativo. Es decir, los concursantes no pudieron utilizar cartones, papeles, maderas traídas por ellos y mucho menos combustible.

Algunos de ellos tuvieron dificultades para iniciar el fuego ya que la leña suministrada (a todos por igual) era de tamaño grande y, según refirieron casi todos, se trataba de una especie arbórea que no es la mejor para estas cuestiones. No obstante, el tema agregó una dificultad adicional y al ser para todos igual, nadie pudo sacar ventajas de ello.

Sobre las 9.30 horas de la mañana, primera recorrida del cronista de este medio, ya las costillas comenzaron a dorarse y los concursantes aprovecharon para hacer un primer descanso y comenzar con la rueda de mate mientras hacían preparativos para montar sus mesas de trabajo. Sobre ellas, fueron disponiendo diferentes exquisiteces para su degustación. Picadas completas elaboradas por algún comercio local dedicado al rubro pero también chorizos secos, jamones y bondiolas de propia producción, ya que muchos de los concursantes están radicados en zonas rurales y es ésta una práctica habitual en sus explotaciones.

El olorcito a asado chirriante inundó todo el predio de la expo, ya que el viento proveniente del norte lo trajo hacia el interior de la muestra y eso activó que mucha gente que desde temprano comenzó con sus recorridas se acercara al escenario del concurso para observar, no solamente la labor de los asadores sino también sus respectivas presentaciones, que incluyeron vestuario y hasta algunos detalles de escenografía.

A las 12.30 horas comenzaron a desclavarse los asadores y los participantes debieron concurrir con ellos hasta la mesa de jura donde Edgardo Beltrán, junto a Fernando Alzueta y Verónica Larralde examinaron las piezas puestas a su consideración, dialogaron con cada uno de los participantes, efectuaron cortes y finalmente degustaron la carne recién asada que, puesta a la venta, se liquidó en menos de una hora.

Más tarde vino la hora del dictamen, que fue muy trabajoso de acuerdo a lo manifestado por los propios integrantes del jurado ya que la mayoría de las entregas estaban en similares condiciones y características de terminación.

El resultado se dio a conocer ya iniciada la jineteada desarrollada en la pista central y arrojó el siguiente resultado:

Primer premio: Costillar número 18: Anello María Isabel – Biarlo, 100 mil pesos (Bolívar).
Segundo premio: Costillar número 13: Comas José Mauricio – Monzón Juan Pablo, 50 mil pesos (Olavarría).
Tercer premio: Costillar número 16: Rodríguez Marcos – Baptista Sebastián, un costillar – Bolívar.