Con un rotundo éxito de convocatoria se realizó anoche la fiesta del chorizo seco organizada por el Centro Tradicionalista Salinas Grandes. Participaron veinte bolivarenses que presentaron sus producciones. El jurado fue notable porque estuvo conformado por cada uno de los presentes en "la cocina de Salinas" y fueron más de cincuenta personas las que se acercaron para compartir.

Entre risas, charlas distendidas y con mucha alegría y humor se realizó la competencia. Los chorizos de los veinte participantes fueron colocados en dos mesas y cada uno de los jurados debía probar las veinte variedades que había.

Al finalizar la ronda de prueba cada uno de los jurados debía anotar en un papel los dos chorizos preferidos que estaban identificados por números, pero sin el nombre de quién lo había llevado. Cuando finalizó la ronda y todos quedaron "pipones" según las palabras de Roberto Godoy, presidente del Centro Tradicionalista, se realizó el conteo y el chorizo más votado fue el que estaba identificado con el número veinte y resultó ser el chorizo que había llevado a concurso precisamente Salinas Grandes. El segundo lugar fue empate y los ganadores fueron el plato número doce con el chorizo presentado por Javier Marcilese y el plato número 1 con el chorizo que llevó Cachi Flores.

Los tres ganadores recibieron un premio y los integrantes de Salinas Grandes decidieron sortear el suyo entre los participantes que no habían ganado. Un noble gesto de los Salineros que nunca dejan de sorprender con sus acciones. "Gracias por competir, pero principalmente por compartir este momento de amigos", dijo después de la premiación Roberto Godoy.