Luján María Jorgelina Berdesegar es, como informó este diario, la nueva jefa de Inspección distrital, en reemplazo de Luciano Teodoro Villarreal, que accedió a su jubilación.

La nueva conductora general de la Educación vernácula viene de ser inspectora de Nivel Primario, y entiende que todo su recorrido previo a través de diversas funciones y experiencias, políticas y docentes, le será útil para desempeñar su nueva tarea, desde su oficina sobre calle Alvarado en una sala del primer piso del exHotel Plaza, reciclado como sede de varias dependencias del estado provincial. En principio, Jefatura estará disponible de 8 a 17 horas, de lunes a viernes.

Berdesegar accede al cargo a propuesta de la línea política que conduce el municipio y que se referencia en el senador provincial Eduardo Luján Bucca; es un nombramiento político, sin fecha de caducidad pero que puede ser reemplazado en cualquier momento; la condición para aspirar al puesto es ser inspector distrital de algún nivel.

Por otra parte, la nueva jefa de Inspección pertenece al SUTEBA, gremio del que fue miembro de comisión directiva hasta hace muy poco.

¿Por qué aceptaste?
- Es un cargo que te permite llevar adelante la gestión y acciones concretas por todos los niveles y modalidades. Es un lindo cargo, es un gran desafío. Ya tengo la disposición de la Dirección General de Cultura y Educación de la provincia y el acuerdo político.

¿Cuál es la tarea, concretamente?
- Desarrollar la educación nada más y nada menos que de todo el distrito. Que se den todas las condiciones en las escuelas, que se desplieguen todos los diseños curriculares pedagógicos, que cada propuesta en las aulas corresponda a las necesidades de los chicos y a lo que marca la normativa vigente. De lo que se trata es de acompañar a cada inspector de todos los Niveles en la gestión de los recursos que se necesitan.

Se sobrentiende que, por tu labor de estos años, como docente, como inspectora y como dirigente sindical, conocés el escenario que encontrarás en el ejercicio de tu flamante función.
- Sí. Yo creo que eso significa un plus: mi paso por el SUTEBA me dio muchas herramientas y cercanía con los niveles de la Educación, en particular Primaria, y haber militado políticamente también representa un instrumento. Fui secretaria de bloque (del peronismo) en el Concejo, lo que me formó en una línea de gestión administrativa. Y haber sido directora de una escuela grande, como la 2, me proveyó herramientas para gestionar y gobernar instituciones educativas. Por otra parte, estoy a una tesis, que ya tengo armada, de graduarme como licenciada en Gestión Administrativa, lo que también contiene recursos que emplearé para trabajar aquí.

Tu oficina está en el ex Hotel Plaza, pero entiendo que buena parte del trabajo consistirá en recorrer escuelas, articular con directivos, docentes e inspectores...
- Me gusta más estar en las escuelas, pero hay que hacer 'oficina' también. De lo que se trata es de equilibrar las cargas entre el estar en el territo rio y el llevar adelante las gestiones que se requieran. Hay que tomarse un tiempo para responder los mensajes, para pensar, para acordar, cosas que se llevan a cabo en la oficina.

"SUTEBA llena todas mis luchas y mis banderas"

La flamante funcionaria remarcó durante el diálogo con este diario que, si bien ya no es más secretaria adjunta del SUTEBA, su vínculo con el gremio, al que sigue perteneciendo como afiliada, "no va a cambiar", toda vez que se trata de "un espacio que sigo eligiendo, y que llena todas mis luchas y mis banderas".

Y por supuesto que esos años en la dirigencia sindical también te han de servir para tu nueva función.
- Claro, porque contribuyeron a que tenga una mirada integral respecto de la defensa de la educación pública y de los derechos de los trabajadores.

Milei "ataca y sabotea", pero Kicillof "es un escudo, da tranquilidad y confianza"

¿Cómo proyectás que será ser la cabeza de la pirámide de la educación pública distrital en un contexto político como el actual, con Milei presidente?
- Yo creo que el estado nacional ataca a la educación. Y tiene una clara intención de sabotaje continuo hacia las provincias en lo relativo a llevar adelante sus planes educativos. En su última conferencia, Milei le pidió a las provincias que se hagan cargo, más aún, porque ya se están haciendo cargo (de la educación). Pero tenemos un escudo: el de la provincia, el del gobernador Kicillof. Ese respaldo hará que la tarea sea más sencilla. Para la Provincia, la educación es importante, está en su agenda, siempre se están inaugurando escuelas, jardines, al tiempo que trata de cubrir todos los vacíos que deja la Nación. Desde entregar netbooks hasta llevar adelante los acuerdos paritarios. En Bolívar tenemos, creo, ocho obras paradas, que habrá que continuar gestionando y en ese sentido la provincia sigue poniendo lo que le corresponde. Otorga tranquilidad y confianza contar con un gobernador que entiende que la educación pública es un derecho y no un servicio esencial. Los que la consideran un servicio esencial hablan de usuarios y clientes, mientras que a nosotros nos gusta hablar de sujetos de derecho. En nuestra visión y construcción, nuestros alumnos son sujetos de derecho, no usuarios. Esa es una postura clara que debemos tener y continuar defendiendo; para que no nos confundan.