MÚSICA. Se realizará el sábado un encuentro de bandas de acá y de afuera

Bajo organización de Pugilismo Crónico -una de las participantes- y Héctor Pando, a cargo de la cantina del lugar, se realizará este sábado en El Fortín un encuentro de bandas que concretará su tercera edición, y que en la ocasión nucleará al mencionado grupo de acá con varios de afuera: Pugilismo Crónico, Lira, Anticuerpo (ambas de Nueve de Julio), Cosas que no van (proyecto de Olavarría formado por bolivarenses que se forman en el Conservatorio de Música de allá) y Cabrones (de Las Flores), darán vida y vibra rockera y metalera a este abrazo musical, con Jorge Daniel Godoy en la batuta del sonido.

Se convoca para las 22, pero se calcula que la música comenzará a sonar a la medianoche. La entrada es de 3 mil pesos, y podrá cenarse en el sitio, ya que habrá mesas en el salón y un servicio de cantina con pizzas, choripanes y otras opciones, más cervezas, vinos, gaseosas, etc. Cuando las bandas concluyan su faena, se musicalizará el salón con música para bailar.

Pugilismo Crónico toca un punk cancionero (mayoría de temas propios). Cosas que no van, rocanrol y covers de Pappo y artistas afines. Lira, stone metal. Anticuerpo, funk technoso. Cabrones, punk rock.

A la deriva

¿Qué expectativas tienen con la tercera edición del encuentro?

Daniel Castillo, guitarrista de Pugilismo Crónico: - Mi idea, personal, es fomentar que los chicos se tiren por la música, por lo cultural. No estoy en desacuerdo con la música actual, pero un poco se está perdiendo la banda de garaje, de amigos, se está tornando muy individualista. Hay mucha gente haciendo música muy bien y no tiene reconocimiento, y los chicos como que no están en eso, y como que tampoco hay espacios. Y lo que yo intento es generar eso: que encuentren un lugar donde mostrar lo que hacen, y si son bandas mejor.

¿Tu banda, Pugilismo Crónico, no está teniendo lugares donde tocar?

- No. No. La mayoría son privados, y están pidiendo que lleves casi todo. Es lo que siempre pasó, casi por el choripán y la gaseosa, y hay mucho gasto, mucha pérdida de tiempo. Es algo recurrente, que hace rato se está tratando de cambiar y un poco se cambió.

¿Un poco se cambió?

- Se podría decir que sí. Que hace unos años en el Cantabolívar, o el Bolívar Pueblo, empezaron a reconocer a los artistas locales, pagándoles al menos algo. Antes no pasaba. El Me Encanta es una vez al año. Te pregunto puntualmente por Casa Negra, que ha tenido mucha actividad este año, han pasado muchísimas bandas por ese lugar.

¿No tienen cabida allí?

- Digamos que el estilo nuestro, el estilo que tratamos de promocionar o dar a conocer... Esos estilos que no son tan populares no encuentran un lugar, entonces hay que tratar a todo pulmón de mostrar lo que se puede y usar todas las herramientas que tenemos a mano para que la gente se acerque.

¿O sea que a Casa Negra no le interesa Pugilismo Crónico? No sé si tuvieron contacto...

- Sí, yo hablé con ellos. No es que no les interesa, sino que es muy difícil la cantidad de personas como para que les sirva a ellos.

Ustedes no pueden garantizar que asistirán cincuenta.

- No. Termina siendo amigos, muchas veces termina siendo bandas que tocan para bandas... Y la idea es fomentar una inquietud, que la gente vaya, que un chico nos vea y quiera aprender. Eso es lo que intentamos. Más allá de mostrar lo que hacemos.

Viejos prejuicios nuevos

"Si la gente nos ayuda, si todo va bien, la idea es hacer estos encuentros cada tres meses, sumando gente de acá, si es posible bandas de chicos jóvenes", dijo Daniel Castillo, guitarrista de Pugilismo Crónico, grupo organizador del festival zonal de rock del próximo sábado en El Fortín (ver nota principal).

Acá es muy fácil ayudar: hay que ir. Más allá de decir, de discursear, si alguien quiere ayudar a que estas movidas se consoliden, tendría que concurrir. En principio, este sábado.

- Tal cual. Tal cual. No hay mucho más que eso eh... O compartiendo en redes la información, eso también es una ayuda. Porque en sí, hay mucha gente que escucha los subgéneros del metal, pero termina siendo medio tabú. Siempre se asoció a cosas malas. Y nada que ver.

¿Siguen vigentes esos prejuicios?

- Un poco ha cambiado, pero yo que ando en la calle te digo que persisten. ¿Se continúa asociando el rock duro a lo satánico, a alcohol, drogas, vagancia, disturbios?

- Sí. Sí. Que no es para la familia, no es para los chicos... En todos lados sigue. Aunque mucha gente escucha esta música, pero como que es una cosa privada, de un grupo, y parece que no se animan. Es probable que esté mejor visto que una persona escuche cumbia u otros estilos, que música más pesada. Al que escucha esos estilos se lo mira raro, todavía.