La convicción de la necesidad de juntar fuerzas y deponer individualismos, el esfuerzo realizado desde los dos sectores más poderosos del radicalismo local y la demostración de madurez política que ello representa, fueron vértices por los que giró el diálogo periodístico mantenido con Juan Carlos Morán y Pablo “Tula” Fabris en nuestra Redacción, a poco más de 30 días de las Elecciones PASO que abrirán el camino hacia las Generales del mes de Octubre.

Juan Carlos es precandidato a intendente municipal y el errequista Fabris lo es encabezando la lista de postulantes a concejales. Ambos pusieron énfasis en remarcar el largo camino transitado hasta alcanzar esa unidad, en la que muestran como principales actores a los dos líderes indiscutidos de los movimientos internos (el propio Morán y José Gabriel Erreca) resaltando la figura del ex intendente Alfredo Carretero, quien fue una principal carta de unión, según ellos mismos lo dicen.

“Ambos grupos fuimos conscientes de la necesidad de alcanzar esa unidad para ganar las PASO y a partir de allí enfocarnos en lo que verdaderamente creemos necesario, que es ganar las elecciones generales para provocar un cambio imperioso en el municipio. Nuestro frente está fortalecido, expresa Juan Carlos Morán, más allá de que nos hubiese gustado que hubiese menos listas, porque las 5 listas generan una dispersión de votos que necesitamos unir de cara a Octubre; pero nuestro adversario real es la lista que encabeza Marcos Pisano, que aglutina una clara línea de continuidad de estos 12 años que para nosotros llegaron a su fin. Consideramos que somos los dos grupos mayoritarios del radicalismo. Creemos que generamos una base que tendremos que ampliar luego para ganar y gobernar. Desde ese punto de vista interpelamos a la sociedad por los problemas que realmente la acucian. A nivel local es la salud, el hospital, la vivienda, el tránsito, el trabajo, etc. Allí es donde debemos dar respuestas y mostrar una clara alternativa para demostrar que somos el cambio”.

Pablo Fabris es quizás el símbolo más claro que muestra la cristalización de esa unidad que enarbolan como un logro los entrevistados. Hombre de marcado perfil técnico, ha colaborado permanentemente “desde las sombras” con concejales de la línea de Erreca y ésta será su primera participación en una lista de cargos electivos. Contador público de amplia trayectoria en la actividad privada, siente que ha llegado su momento y “que para cambiar las cosas que están mal es necesario involucrarse y comprometerse. No hay otro modo”, afirma, “Los dos grupos entendieron el momento (sostiene Fabris en relación al acuerdo Morán-Erreca). José Gabriel y María Emilia son ejemplos de dejar de lado egos personales. Necesitamos cambiar Bolívar y por eso fue importante ese esfuerzo hecho de los dos lados. Porque ahora se inicia una nueva etapa, dejando de lado algunas diferencias, que existieron, y comprendiendo que cuando nos centramos en los temas principales esas diferencias son casi inexistentes. Lamentamos no haber podido terminar de hacer la unión con el resto de las líneas internas, pero creo que después del 13 de Agosto tendremos una lista muy fortalecida para ganar el municipio”.

¿Asumís algunos riesgos saltando a la actuación política?

“Quizas; pero yo siento que puedo ser útil. Hace 13 años que volví a vivir a Bolívar, tengo mis cuestiones personales en orden y tengo tiempo. Y, por supuesto, no vengo a vivir de la política sino todo lo contrario. Creo que puedo hacer un aporte después de 34 años en la actividad privada y esas experiencias allí recogidas son perfectamente aplicables a la actividad pública. Además, el país necesita eso y Bolívar en particular. Gente que lo sepa organizar. Veo que desde ambos sectores sumamos esos perfiles y hemos conformado un gran equipo, con mucho entusiasmo. Esa sumatoria de capacidades, ideas y trabajo hará posible un cambio para Bolívar. Nuestros vecinos necesitan soluciones, hay muchos en situación preocupante. Habrá que mantener las cosas que están bien, pero no dudar en cambiar aquellas que necesitan cambios”.

Tal vez uno de los sellos distintivos del movimiento que lidera Juan Carlos Morán sea el mantenimiento de equipos de trabajo, que vienen desenvolviéndose desde hace más de un año con la premisa de diagnosticar realidades pueblerinas y proponer soluciones. Morán aduce que tal determinación tiene raíz en la necesidad de llegar a la intendencia de Bolívar con un plan ya definido de acción, “porque no habrá tiempo para perder, tal es la gravedad de lo que nos encontraremos”. “Se va a necesitar decisión, carácter, valentía; pero sobre todo harán falta equipos eficientes en base a información y evidencias, no en base a creencias. Y por eso es importante, por ejemplo en Tránsito, comenzar haciendo un mapa de siniestralidad, para saber dónde están los problemas mayores. Lo mismo con todas las áreas, en las cuales el diagnóstico es lo primero, es la base para la elaboración de propuestas.  Por eso tenemos tantas comisiones de trabajo haciendo su aporte desde hace muchos meses. Hoy son 14 esas áreas, perfectamente ensambladas ahora con el grupo de José Gabriel, quien tiene a mucha gente valiosa, con experiencia”.

El precandidato a intendente describió finalmente el enriquecimiento que ha generado al espacio que encabeza la sumatoria de nombres provenientes del errequismo y puso el ojo en algunas personas del equipo que, a su criterio, serán fundamentales para una buena gestión.  “Pablo ha sido asesor de varios concejales. Es el hombre que más ha estudiado y comparado la administración y seguramente ha visto la curva de evolución negativa y el déficit primario que tiene hoy el Municipio. Es muy importante tenerlo como precandidato a concejal en primer término, del mismo modo que es importante tenerla a Karina Otano, quien a los 25 años fue concejal luego tesorera municipal de las gestiones de Simón y Erreca, a Andrés Porris que fue jefe del Departamento de Administración del RENAPER a los 26 años. Un organismo gigante, con un presupuesto dos veces mayor que el de Bolívar y el doble de personal. Tenemos gente muy interesante para aplicar a una administración eficiente y varios equipos ya conformados para asumir una gestión sana a partir de Diciembre”.

Un problema a resolver será, seguramente, el de los salarios municipales que en algunos casos son demasiado bajos y ello se enlaza con la política a aplicar en relación al plantel de trabajadores municipales…

Fabris: “Lo primero que hay que hacer es eliminar tantos cargos políticos que cobran funcionarios que son claramente innecesarios. Es una forma de dar el ejemplo y la política tiene que dar ese ejemplo. Pero además ello repercutirá a favor de muchos empleados calificados que tiene el municipio, con tanta o mejor capacidad para asumir funciones directivas que quienes hoy son sus jefes. Municipalidades como la de Saladillo, por ejemplo, que es un distrito muy parecido a Bolívar, resuelve sus cuestiones orgánicas con la mitad de los funcionarios que hoy hay en Bolívar. Y esos son los salarios más altos que hoy paga la Municipalidad”.