Este viernes, la justicia ordenó prisión preventiva para Germán Alejandro Olivare, acusado del asesinato de Rocío González, madre de su hija de cinco años, ocurrido en los primeros días de agosto en un domicilio ubicado en Barrio Parque.

A casi un mes del femicidio de Rocío González, la jueza de Garantías Fabiana San Román, a pedido de la Unidad Fiscal de Instrucción Descentralizada Nº15 de Bolívar, procesó con prisión preventiva al único acusado por el crimen de la joven policía.

La mujer de 32 años fue encontrada sin vida en su domicilio ubicado en la calle Larregle entre Pueyrredon y J.C. Báez el 2 de agosto durante la noche. Su cuerpo yacía en el piso del comedor de la vivienda con varias heridas de arma blanca.

En el mismo lugar se encontraba Germán Alejandro Olivare, también con heridas de arma blanca, pero en este caso durante la investigación pudieron determinar que fueron autoinfligidas, por lo cual estuvo internado primero en el Hospital Capredoni y después en el Hospital Pinto de la ciudad de Azul hasta el 16 de agosto.

Luego de escuchar los argumentos esgrimidos por las partes, la jueza San Román resolvió hacer lugar a la solicitud de la fiscal Sebastián y dictó la prisión preventiva del acusado. Con esta medida, Olivare permanecerá detenido por el femicidio cometido contra su ex pareja y se enfrenta a una pena de prisión perpetua.

Olivare, de 38 años, se encuentra detenido en la Unidad Penal Nº2 de Sierra Chica y está acusado como autor del delito de "homicidio agravado por el vínculo, por alevosía, ensañamiento y por mediar violencia de género en perjuicio de quien era su pareja" (femicidio).