12 de agosto de 2024

ANTONELLA ALESANDRELLI

ANTONELLA ALESANDRELLI. "Nada puede salir bien con semejante desigualdad social y disparidad" contra mujeres y disidencias

"El sistema directamente está podrido", y entonces crecen la inseguridad, los asesinatos y los femicidios, considera Antonella Alesandrelli, referente local del Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS): "Cuando hay crisis económica se agravan estas problemáticas", enfatizó la joven militante.

por
Chino Castro

Alesandrelli irrumpió en la política local al batir en una interna a Marcelo 'Tin' Alonso en 2021, como representante de la fuerza liderada por Myriam Bregman, Nicolás Del Caño, 'Chipi' Castillo y Alejandro Vilca.

Debo comenzar por pedirte una reflexión -como mujer, como bolivarense, como líder local de un espacio de la izquierda- sobre los dos asesinatos ocurridos en Bolívar en tres días, uno fue femicidio. Dos muertes particularmente violentas y crueles, y algo poco frecuente en nuestro pueblo.
- Es tremendo lo que está pasando, pero no sólo a nivel local sino a gran escala. Está creciendo la violencia, está creciendo el malestar, y me parece que tiene que ver con la degradación social en general. Cuando hay crisis económica se agrandan y agravan estas problemáticas; cuando hay problemas estructurales que no se cambian de raíz, y que se perpetúan en el tiempo, se generan todas estas violencias a mayor escala aún. Y con respecto al femicidio de Rocío, hay que decir que el Estado es responsable, por políticas como las de Milei, de vaciar programas y espacios de defensa de las mujeres, o al cerrar el Ministerio de la Mujer. Vacía el Estado en general y echa a muchísima gente, en especial en estos sectores. Pero el Estado también es responsable porque se trata de casos que se pueden evitar, y no se actúa a tiempo.

Femicidio de Rocío: "El Estado es responsable. Por las políticas de Milei, de vaciar programas y cerrar el Ministerio de la Mujer", pero también porque "no se actúa a tiempo"

Rocío había denunciado que venía siendo víctima de episodios de violencia por parte de su expareja, y sin embargo pasó lo que no tendría que haber pasado.
- Sí. Pero también me parece que esto tiene que ver con la sociedad en la que vivimos, con algo estructural, más allá de una perimetral; me refiero a un sistema que es patriarcal, machista, en el que las mujeres, y las disidencias en general, no tenemos la protección que correspondería, porque nuestros derechos están vulnerados por ese mismo sistema, desde lo mínimo a lo más relevante, hasta derivar en este último eslabón, que es el asesinato de una mujer. Hay una desigualdad estructural, en todos los sentidos, y después pasan las cosas terribles que pasan.

En tu criterio hay entre ambos hechos una vinculación, o un escenario que lo propicia: la degradación social.
- Sí, para mí sí. Para mi es el sistema en el que vivimos, que directamente está podrido. Nada puede salir bien con semejante desigualdad social, semejante disparidad de condiciones que padecemos las mujeres y las disidencias. No hay salida para los pibes, ¿qué salida le podés ofrecer a un pibe hoy? Antes, a los 16 o 17, un pibe o piba soñaba con la casa propia, con un auto, un trabajo, podía proyectar una familia, y hoy no puede ni cambiar la heladera, que encima quizá ni siquiera sea propia. ¿Qué futuro le estamos dando, qué esperanza de algo bueno puede tener ese pibe, y la juventud en general?

Y si no hay esperanza, a ese vacío quizá lo ocupen el odio, la frustración.
- Hay bronca, hay odio, y me parece que los pibes están en esa, yo que soy profesora (de Música) en escuelas secundarias lo veo. Los pibes no son malos, nadie nace chorro, violador ni asesino, pero se va fomentando todo eso.

¿Ves mucho pibe frustrado, sin poder proyectar nada?
- Sí, sí. Es más, te lo dicen: '¿Para qué voy a estudiar si trabajo no voy a tener?'. Ven a sus padres renegar todo el día, teniendo que afrontar tarifas de ciento y pico de miles de pesos, con ingresos que no les alcanzan para comprar unas zapatillas ni útiles escolares... Ven y viven todo eso, observan que los padres trabajan todo el santo día y padecen una situación así, entonces ellos qué esperanza van a depositar en el mundo del trabajo, qué interés van a tener en trabajar. Por eso pregunto qué mensajes les estamos dando a los jóvenes, como sociedad.

Y con respecto al femicidio, me parece importante que el 24 de agosto se va a realizar en Bolívar el séptimo Encuentro regional de Mujeres y Diversidades. Yo creo que tenemos que hacer de ese encuentro un espacio de reflexión, debate y lucha. Hay que organizarse para luchar contra el machismo porque no queremos seguir reclamando justicia cuando ya es tarde.

¿Cómo se emergería de semejante descomposición social?
- Hay que plantearse de verdad, profundamente, qué tipo de sociedad queremos. Si de verdad queremos eliminar la pobreza y la gran riqueza, porque el problema está ahí, en la distribución. Es como un círculo vicioso, porque se arman fórmulas electorales para ganarle a la derecha, para que no venga un tipo que nos va a destruir y a sacar todo, y terminan poniendo a gente que también es de derecha. Pretenden ganarle a la derecha con derecha, y me parece que no va por ahí sino por discutir cómo cambiar estructuralmente el sistema y extirpar de raíz algunos flagelos.

"Hay complicidad de los gremios con el gobierno: ¿cuándo van a salir si no ahora?"

¿Y la salida es con política? Porque el triunfo de Milei expresa una crisis muy fuerte de lo institucional, de la política misma y hasta del propio sistema democrático. Sus votantes, entre ellos una mayoría de jóvenes, han dicho al elegir a alguien así que ya no creen en las instituciones ni en la política, y por detrás de eso late la convicción de que la democracia no ha servido para nada.
- Tal cual. Hay una gran frustración y un terrible descontento, que por supuesto no suceden como por arte de magia ni de un día para el otro. Me parece que están ligados a la desilusión producida por gobierno tras gobierno prometiendo cosas con las que no han cumplido. Creo que la última desilusión fue el gobierno de Alberto. Dijo que iba a terminar con el ajuste, levantó banderas referidas a asuntos muy sentidos por nuestro pueblo, y después no hizo nada, sino al contrario. Ahora se gestan uniones populares para ganarle a la derecha, por ejemplo en Francia, y eso termina provocando una gran bronca y que la gente vote a quien se presenta como disruptivo y promete que será diferente, algo distinto. Obviamente Milei fue recontra inflado, por los medios de comunicación, porque tuvo poder para hacerlo, entonces se presentaba como lo diferente, dijo que venía contra la casta, que para la gente era la representación de todo lo que le provocaba bronca y frustración, y lo terminaron votando. Pero por supuesto que creo en la política, sí que creo que la salida es con política. Pero habría que pensar si sirven todas esta coaliciones y armados de listas que no reflejan una lucha real contra la derecha, ya que por ejemplo en la calle, donde debería reflejarse esa contienda contra las políticas de Milei, no sucede. No se ve que la CGT salga a la calle, que convoque, me parece que la gente tiene ganas de salir y cuando hay una convocatoria clara lo hace, como ocurrió en enero último. Pero después, cuando se trató la ley 'Bases', hubo una convocatoria a medias, entonces algunos fueron y otros no. Los gremios nos tendrían que defender. Para mí hay una complicidad total de los gremios con el gobierno de Milei. Hay una reforma laboral, hay un ataque directo a la población en general y en particular a los trabajadores, ¿y cuándo van a reaccionar si no es ahora? En vez de plantarse hoy seriamente contra las políticas de Milei, están pensando en un rearmado electoral para seguir en el poder. Ahora vemos también a Grabois y a Moreno tratando de armar electoralmente, por la crisis de hegemonía en el peronismo. Pero hoy, que es cuando tenemos que actuar contra las políticas del gobierno, no lo estamos haciendo


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