Según el poeta Hugo Mujica, "siempre es para huir /que cerramos una puerta", pero en el caso del taller de artes plásticas de Paula Danessa en La Cultural, podría decirse que "siempre es para surgir / que abrimos una ventana", dado que, a partir de ese concepto, ventana, los talleristas -gente de variada edad y experiencia con la pintura- nos muestran y comparten algún trozo d su alma a través de un cuadro.

La expo abrió el domingo pasado en el Salón de Arte de La Cultural, y permanecerá vigente todo septiembre, de lunes a sábados en diferentes horarios en San Martín 1065.

¿Qué es Ventanas?
Paula Danessa: - Surgió de la idea de hacer una obra que acompañe a mis alumnas de manera conceptual, darles un concepto para las imágenes pero que las puedan abordar con total libertad. El nombre nació de leerles una poesía llamada Ventanas y otros textos que referían a ventanas, que utilizamos como disparador para crear. Fue una manera de emplearlo como lineamiento general. A ese concepto, ventana, cada alumna lo expresó como lo sintió: podía hacer una ventana, literalmente, o algo abstracto, subjetivo, según lo que a ella le sucediera en la mente y el cuerpo.

¿Pero con imágenes, o también 'valía' incluir palabras?
- Las dos cosas. Si alguien quería, podía incluir un poema. Pero nada de modo forzoso, ni tirando ideas yo, para que puedan ser libres y no condicionarlas. A partir de su interpretación, crear, de eso se trató.

Fueron dos meses de trabajo en el marco del taller de artes plásticas de La Cultural, a razón de un encuentro semanal de dos horas. Aunque algunas de las participantes cursan este espacio desde hace cuatro años, cuando Danessa lo abrió a su regresó a Bolívar. Cada estudiante elaboró dos cuadros para Ventanas (naturalmente, parte del trabajo se realizaba en casa), casi quince personas en total incluyendo a la propia instructora, que presentó una colección actual de bocetos de un tinte netamente minimalista, en franco contraste con producciones anteriores suyas signadas por los colores fuertes.

"Al pintar uno se embarca en una búsqueda personal, y salen cosas desde el alma"

¿Qué surgió, qué se produjo?
- Fue muy loco, porque la mayoría, si bien tengo algunas alumnas nuevas, es gente que viene hace tres o cuatro años. Y suceden procesos emocionales durante la creación. Cuando uno está pintando está embarcado en una búsqueda personal, y entonces salen cosas desde el alma, o van buscando imágenes de referencia para concebir algo propio.

Desde el punto de partida, que fue leer una poesía. Siempre lo visual se puede ayudar, pero la idea fue que elaborara una imagen propia. A algunas el concepto ventana les recordó a su abuela, o a la casa de campo de su familia, o a cuando su hijo nació. Se cuecen todas esas cosas, más en un proceso de dos meses; se abren esas ventanas.

Cada quien abre una ventana interior y su creación brota desde ahí.
- Sí o sí. Eso es totalmente respetado, por eso no trabajaría con una imagen y que todas hicieran la misma. Es re difícil de laburar un proceso así, porque hay que respetarlo y guiarlo, más allá de lo pictórico, de las instrucciones técnicas que una da como profe.

Libertad en el concepto, contención en la realización

Justamente: tu lugar como profe, en todo caso el que elegís, es el de guía, de acompañante. Quizá haya otra manera de encarar la faena, más regida por la imposición.
- Sí. De hecho, nos reímos con mis alumnas, con algunas de las cuales nos conocemos un montón, porque tengo como una manera imponente de habar, esta es mi coraza (se ríe; es una mujer muy alta), pero no soy así a la hora de realizar arte, no me parece que sea lo mejor, para nada. Es guiar.

Y guiar implica otorgar libertad.
- Sí. Hasta cierto punto. Con el 'Mono' (Alabart), mi profe de Arte, siempre hablamos de eso: para improvisar, los músicos de jazz parten de unas ciertas reglas, y pasa así en el arte en general. En la pintura, si querés hacer verde, tenés que mezclar azul y amarillo. La libertad está en el concepto, la idea y la emoción, pero a la hora de la realización estamos contenidas.

"El cuerpo es la extensión de la idea"

Entiendo que la clave está en interpretar hacia dónde quiere ir el alumno y acompañarlo, guiarlo, como marcás, para que llegue allí, para que obtenga los frutos de su proceso. Quizá brindarle las herramientas adecuadas para que recorra su camino...
- Totalmente. Para que llegue adonde quiere ir. A mí alguien me dice que quiere hacer esto, aquello y eso otro, y ella es la que tiene la imagen en su mente, yo lo que tengo son sus palabras.

Pero sí le podés decir qué herramientas le conviene usar, qué recursos.
- Sí, eso sí. De hecho siempre les pido que no se condicionen a un instrumento, porque tenés espátulas, pinceles, manos, dedos, y además podés hacerlo con las pinturas que quieras. Nuestro cuerpo es la extensión de la idea, es lo que va a movilizar esa idea, la herramienta que le pongamos es un pedacito más de extensión. Entonces trato de que la idea no sea limitante, porque por ahí se la imaginan de manera compleja, y ahí entra mi guía, para eso me he especializado y creo que me sigo especializando al estar con ellas y manejar esta manea de enseñar.

"Veo progresos año a año"

¿Estás conforme con la producción general?
- Sí. Sí sí. Veo progresos año a año. A fines de octubre este espacio cumplirá cuatro años, ni bien volví a Bolívar lo abrimos. Yo prefiero hablar de arte en general porque doy escultura, pintura, grabado, dibujo...

Paula Danessa es lo que se dice una chica hiperkinética y ecléctica: es profesora y licenciada en Artes Visuales por la Universidad Nacional de Bellas Artes de La Plata; martillera y corredora pública ("la hice durante mi embarazo y el primero año de mi hija a la carrera, porque estaba aburrida", dice y ríe) y el año que viene proyecta comenzar la licenciatura en Psicología, en el CRUB.